A pesar de que se realiza
un trabajo intencionado por parte de los
inspectores que pertenecen a la
Dirección Integral de supervisión, continúa siendo algo frecuente, cotidiano,
observar indisciplinas sociales como las piqueras improvisadas que han creado
los carretoneros de Manatí: piquera en las áreas aledañas al parque José Martí,
en la calle Frank País, detrás de la casa de cultura Olga Alonso, al lado y
detrás de los puestos de gastronomía de los particulares dentro del área del
central.
En trabajos anteriores
desarrollados por este periodista, el director de la Dirección Integral de
Supervisión Ángel Pérez Cruz, explicaba que se había tomado medidas, entre
ellas la aplicación del decreto-ley 315, traducido en multas de 700 pesos y además
declaró que se realizaría un trabajo de conjunto con el MININT para hacer
cumplir la ley y tomar medidas ejemplarizantes.
El directivo señalaba
también el vertimiento de basura en la circunvalante sur, el paso de bicicletas
y otros vehículos sobre la plaza 1ro de mayo, y la colocación de estos medios
de transporte en lugares donde está señalizado que no se deben poner.
Si bien es cierto que el
municipio hoy solo cuenta con los coches como único medio de transporte para
viabilizar, por ejemplo, el traslado de artículos a clientes desde lugares
céntricos como la tienda recaudadora de divisas (TRD) incluso, el traslado de personal desde lugares
cercanos al parque, otra realidad es que hasta la fecha la única piquera
reconocida legalmente como tal, es la que se encuentra cerca de la terminal.
Por eso es indisciplina
tratar de buscar pasaje con estos vehículos de tracción en las áreas centrales del poblado y cerca de
lugares que son para el consumo humano, porque el caballo hace sus desechos
donde se tenga parqueado y al final esto trae consigo malos olores,
insalubridad y en el peor de los casos
vectores que pudieran traer
consigo una enfermedad. Por otro lado se afea la imagen de Manatí cuando
se vislumbran calles sucias con desechos de estos tipos de animales.
Son tiempos de combatir estas indisciplinas
haciendo cumplir la ley, sobre todo ahora que se acercan las festividades en el
municipio, y la limpieza y la salud, se vuelven dos temas de primer orden.
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