Los
productores porcinos de Manatí reducen en la actualidad la contaminación
ambiental asociada a los desechos animales y tienen acceso a una fuente
renovable de energía gracias a la ejecución, en el territorio, del Proyecto
Biomas Cuba.
En
este sentido, una primera fase de dicho proyecto, favoreció a criadores de
cerdos del municipio cabecera; durante la ejecución de la segunda se continúa
la construcción de 18 digestores para el tratamiento de los residuales en
granjas porcinas.
Además
de la capacitación y los recursos materiales para la construcción de la obra,
los porcicultores incluidos en el proyecto recibieron equipos que funcionan con
biogás, como refrigeradores, fogones, ollas y plantas eléctricas.
A
estos beneficios se suman también bicicletas y sistema de riego con capacidad
de una hectárea: todo ello, con el objetivo de facilitar la labor de los
productores y favorecer la producción de alimentos para los cerdos.
El
director del centro de desarrollo local, el licenciado Abel Peña Alfonso, dijo
que de acuerdo con la cantidad de animales, se construyen biodigestores de 14,
27 y 41 metros cúbicos, de los cuales actualmente 8
se encuentran funcionando.
Un
digestor es un sistema de fácil construcción que permite trasformar, en
ausencia de oxígeno, los excrementos animales en un gas que se puede emplear
como combustible y en un efluente líquido muy apreciado como fertilizante
natural.
Rectorado
por los especialistas de la Estación experimental de pastos y forrajes Indio
Hatuey, de Matanzas: el proyecto nacional Biomas Cuba también se ejecuta en
Santi Spiritus, Holguín y Guantánamo en aras de fomentar las estrategias
locales de producción de alimentos y energías limpias en el medio rural.
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